Vocero Bolivariano: Hugo Chávez lo dijo: “Nuestro Canciller es un obrero, es un muchacho muy inteligente”

30/6/07

Hugo Chávez lo dijo: “Nuestro Canciller es un obrero, es un muchacho muy inteligente”

30/06/2007

Ana María Muñoz

Diario el Tiempo-Venezuela

Caracas-Fue el Presidente, el mismo que le dio el cargo de Ministro de Relaciones Exteriores, quien recientemente y, en cadena nacional dijo, ante diplomáticos de otros países “nuestro Canciller es un obrero, es un muchacho muy inteligente”. Ponderó y alabó su trabajo al frente de la cancillería. Pero, siempre hay un pero que preocupa, la imagen de nuestra cancillería abandonó la diplomacia habitual del mundo, para darle paso a un hombre, bien vestido, pero guapetón, que manotea y se da el lujo de insultar a quien le viene en gana, sin importarle el cargo que ostenta la otra persona. Igual llama mongólico o retardado a un Presidente, a un ministro, a un senador…y a quien sea, irrespetando, de paso a quienes sufren del Síndrome de Down (una minoría digna en el mundo) y a las personas que, tristemente llegan a la vida con la calamidad de un retrazo mental o, porque alguna enfermedad también los condujo a perder algo de raciocinio. ¿Cómo entonces calificar un despacho que se mueve en medio de insultos e improperios? El sindicalista mejor pagado

Mejor revisemos la “hoja de vida” de nuestro canciller que aparece en Internet. “Delegado Sindical. Fundador del nuevo Sindicato del Metro de Caracas. Miembro del Movimiento Bolivariano Revolucionario 200. Miembro de la Dirección Nacional del MBR 200 (1994-1997). Fundador Nacional de la Fuerza Bolivariana de Trabajadores. Coordinador Nacional de la Fuerza Bolivariana de Trabajadores. Miembro fundador del Movimiento V República. Coordinador del Equipo Parlamentario del Movimiento V República (2000-2001). Coordinador del equipo Parlamentario del Bloque del Cambio en la Asamblea Nacional”. Por ninguna parte se menciona su nivel de instrucción, ni siquiera se dice si hizo un curso, aunque sea por correspondencia. En verdad su trabajo se limitó al sindicalismo y a experiencias políticas de talante menor. Eso no lo descalifica, de no ser por las actuaciones internacionales en las que no ha privado el respeto, y ponderación, exigencias del mundo diplomático. Una prueba evidente de que sin ser un egresado universitario con post grados y demás cursos se puede triunfar, privando en las relaciones el respeto, prudencia y la sobriedad para los demás, lo tenemos en el presidente Luiz Inacio Lula Da Silva. También sindicalista, pero amplio conocedor de la política internacional. No se le salva ni el Papa La última intervención del Canciller venezolano insultando al Juez Baltazar Garzón a quien le dijo que “vino a cobrarle a Conindustria” dejan mucho que desear de la diplomacia venezolana siendo que el Juez español en ningún momento se refirió a nuestro país. También aún se recuerda su interpretación de una declaración del Papa Benedicto XVI en Brasil, la cual nuestro Excelentísimo Canciller “la tomó para sí” y casi le exigió a Su Santidad pedirle perdón a Venezuela y los venezolanos. “Baltazar Garzón vino a Venezuela a cumplir un cobarde y triste papel. Está más cerca de Aznar (un ex presidente de España) y Bush (el mandatario norteamericano) que de cualquier otra cosa. Su paso por nuestro país ha dejado un sabor amargo”, dijo Nicolás Maduro, el canciller. Si vamos más allá, recordemos el incidente que, junto a su esposa e hijo, vivió en el aeropuerto John F. Kennedy de Nueva York que, suponemos, desconociendo las reglas diplomáticas, no se identificó como Canciller y cargaba un bojote de dólares, no permitido en ese país, en el bolsillo. ¡Nunca antes se vio algo similar!. No nos imaginamos al canciller Maduro en cualquier escenario internacional proliferando insultos, retórica de compatriota pueblerino, franela roja (aunque se viste con muy buenos fluxes, aparentemente de altos precios), realizando alguna negociación con diplomáticos de otros países diciéndoles mongólicos o imbéciles cuando no coinciden con su criterio.

Tampoco nos imaginamos a Maduro buscando la conciliación ante un conflicto pues nos tienen acostumbrados a los hachazos y machetazos, también muy ponderados por el Presidente cuando aseguró ante los medios “sacar de nuevo la espada” para discutir con sus adversarios. De todas maneras la política internacional es pautada por el Presidente de la República, quien por cierto, tampoco maneja un verbo muy diplomático. Bastaría con recordar el “cruce” de ofensas con el entonces candidato (hoy presidente) del Perú, de George W. Bush ni hablar, hasta se le ha llamado borracho y lo han amenazado de que los venezolanos “tenemos cojones” y demás. Ni se diga del Papa. ¿Entonces?...Nada, política internacional con arco y flecha porque, con orgullo, somos indígenas, ¡han dicho los más altos personeros del gobierno!. (Intopress)