24/8/07

TALIBANIZANDO HAMASTAN

Especial para AJN.-Según el ex ministro de Asuntos Exteriores de Israel, Shlomo Ben Ami, debe permitirse a Hamás gobernar, a cambio de un plan de estabilidad, si se quiere evitar que Gaza se transforme en una segunda Mogadishu. En su opinión, para que la reanudación del proceso de paz sea plausible, una fuerza internacional debe ser desplegada en Gaza.
Foto: Shlomo Ben Ami.
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Samuel Hadas*
La noticias, días atrás, de que la Unión Europea había suspendido el financiamiento de los pagos del combustible a una de las centrales eléctricas de Gaza, debido a fidedignas informaciones sobre la desviación hacia la caja de caudales de Hamás de un porcentaje de los dineros percibidos por la Compañia de Electricidad y la reanudación de la asistencia pocos días después, atrajeron nuevamente la atención de la opinión pública hacia el suceder en una de las áreas más densamente pobladas del planeta, la franja de Gaza. La Comisión Europea, ajn como es de público conocimiento, paga, en el marco de la ayuda humanitaria de emergencia a los palestinos, carburantes por más de seis millones de euros al mes. El temor de que parte de dichos fondos no se emplean para los fines previstos había motivado la interrupción de la ayuda. Ésta se reanudó a los pocos días en la esperanza de que ¨la ayuda para combustible en Gaza se gestione debidamente¨. Según fuentes de Fatah, militantes de Hamás recorren las calles de Gaza, de puerta en puerta, para cobrar las cuentas atrasadas de electricidad. ¿Es Gaza (Hamastán) peor que Afganistán y Somalia? Desde que la organización fundamentalista terrorista Hamás asumió brutalmente el control de Gaza, después de un enfrentamiento que costó la vida de por lo menos ciento cincuenta personas, entre ellos cincuenta civiles dejando cerca de mil heridos, se viene registrando un lento proceso ya bautizado por los palestinos seculares como la ¨talibanización¨ de este territorio palestino: los asesinatos de rivales políticos, la desaparición de los marcos legales, la ¨nacionalización¨ (o mejor dicho la toma de los edificos de organizaciones civiles y sindicales y su consiguiente islamización, después de enarbolada la bandera verde de Hamás), la islamización de la policía, la dispersión, por la fuerza, de demostraciones de grupos opositores, no son sino algunas muestras de lo que sucede actualmente en la franja de Gaza.Según el periodista palestino Khaled Abu Toameh, la ¨Fuerza Ejecutiva ¨ de Hamás impidió la distribución en Gaza de periódicos identificados con Fatah, entre ellos los cotidianos al-Ayam y al Hayat al Jadida, encarcelando durante varios días a algunos de sus distribuidores. El canal de televisión Al Jazeera, informó a su vez que elementos de Hamás atacaron a un equipo de la televisión de Abu Dhabi. Seguramente estaban filmando escenas ¨indeseables¨para su régimen. Una estación de televisión y radio pro-Fatah ha sido clausurada. Hamás es hoy la ley en Gaza y los arrestos de militantes de Fatah, las purgas de rivales políticos de las instituciones de la administración pública y la opresión de la libertad de expresión están a la orden del día en el territorio bajo su jurisdicción. Los líderes políticos de Hamas actúan en el convencimiento de que nadie puede hoy erradicarles de Gaza. El gobierno israelí se muestra más que reacio al envío masivo a Gaza de fuerzas militares, dos años después de su retirada, pese a la ininterrumpida lluvia de cohetes que cae sobre sus poblaciones fronterizas y la iniciativa de enviar fuerzas internacionales para imponer el orden no tiene posibilidad alguna de prosperar en un futuro previsible. Además, tienen siempre la alternativa de seguir acusando a Israel y a Estados Unidos de todos sus males y, cuando se hace necesario, a la Unión Europea, como en el caso de la interrupción de su ayuda al financiamiento del combustible para la central eléctrica. Cuando sus terroristas disparan proyectiles de morteros y cohetes sobre Shderot y los kibutzim que lindan con Gaza, solo se trata de ¨represalias contra la agresión israelí¨ La situación humanitaria en Gaza se encuentra en caída libre desde que Hamás asumiera el control, según un analista del Daily Star libanés. Los palestinos que votaron a Hamás como resultado de la frustración popular ante la corrupción y el nepotismo que había corroído el Fatah, agrega el periodista, son testigos de una nueva era caracterizada por más de lo mismo y a veces peor. Es así, pero según fuentes de inteligencia israelíes, la posición de Hamás en Gaza no se ha debilitado y, paradójicamente, el sitio económico impuesto a la franja ha incrementado el apoyo popular al Hamás. La razón es de que la asistencia en alimentos, medicinas y artículos de primera necesidad es suficiente por el momento para prevenir una crisis humanitaria¨, pese a que ha prácticamente paralizado la actividad económica de Gaza..Fuentes de servicios de inteligencia, revela el Washington Post, acaban de advertir que el presidente palestino Mahmoud Abbas, no es lo suficientemente fuerte para salvar el proceso de paz y que Hamás, pese a los esfuerzos de Estados Unidos e Israel de aislar a Hamás, esta organización no podrá ser marginado facilmente del proceso. Abbas es por el momento sumamente vulnerable, pese al control de Cisjordania por parte de las fuerzas de seguridad de la Autoridad Nacional Palestina identificadas con Fatah. Los portavoces de Hamás califican a Abbas de ¨traidor¨ a la causa palestina por cooperar con el enemigo sionista y el presidente George W. Bush. Lo que sucede en Cisjordania, según Hamás, es una derrota moral y ¨nadie debe tolerar esta farsa¨. Analistas israelíes advierten ante la posibilidad de que el terrorismo y la violencia se reanuden en el caso de que Abbas no logre avances en el proceso negociador con Israel.¨Hamás, escribe el experto en temas palestinos del Haaretz, Danny Rubinstein, es más que capaz de sabotear la política de Abbas. Mientras el liderazgo de Hamás mantenga la esperanza de mantenerse en el poder en Gaza y de influir en Cisjordania habrá relativa calma. Pero cuando Hamás pierda la esperanza, el terrorismo volverá. Comentaristas e incluso dos anteriores jefes de los servicios de seguridad israelíes consideran que la política de aislar a Hamás debe ser revisada. Según el ex ministro de Asuntos Exteriores de Israel, Shlomo Ben Ami, debe permitirse a Hamás gobernar, a cambio de un plan de estabilidad, si se quiere evitar que Gaza se transforme en una segunda Mogadishu. En su opinión, para que la reanudación del proceso de paz sea plausible, una fuerza internacional debe ser desplegada en Gaza. Pero otros expertos advierten de que Hamás, de lograr salir de su aislamiento diplomático internacional mientras continúa fortaleciéndose militarmente con la masiva ayuda proveniente de Teherán, no solamente consolidará su posición en Gaza sino que logrará minar la autoridad de Fatah en Cisjordania.
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* Analista diplomático. Primer Embajador deIsrael en España y la Santa Sede. Consejerodel Centro Peres para la Paz de Israel.
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A.J.N.- Argentina/24/08/2007

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