La política del silencio
08/09/2007
Opinión
Patricio Abramzon
Infolive.tv
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Horas después de que Siria acusara a Israel de haber violado su espacio aéreo, generando preocupación internacional y temores sobre el posible estallido de un conflicto, tanto el gobierno israelí como Tzáhal optaron por el silencio. Incluso Estados Unidos evitó formular comentarios sobre lo ocurrido. Mientras tanto, en Damasco gritaban indignados por lo que definían como un acto de agresión israelí, y prometieron responder. Más aún, el Primer Ministro Ehud Olmert, en un evento de su partido Kadima, se refirió a todos los temas de seguridad que afronta Israel excepto al incidente del jueves con Siria, dejando atónito al público presente. Las operaciones de Tzáhal en Gaza, los continuos ataques con cohetes kasam y los soldados israelíes secuestrados por Hamás y por Hizbolá formaron parte del discurso de Olmert, pero nada sobre la noticia del supuesto incidente con Siria que recorrió el mundo. Tampoco formularon declaraciones la Canciller Tzipi Livni y el Vice Primer Ministro Jaim Ramón. El Vice Premier Eli Ishay, con quien este reportero dialogó el jueves por la noche, se mostró ofuscado cuando se le preguntó sobre la verdad de lo ocurrido. Ni una palabra sobre los reportes sirios. Lo mismo ocurrió con los generales del alto mando de Tzáhal. “Nada sabemos”, fue la respuesta tajante. El silencio da lugar a las especulaciones. Este supuesto incidente llega justo luego de que el Ministro de Defensa Ehud Barak decidiera reducir la presencia de tropas en las Alturas del Golán, y pusiera fin a los ejercicios masivos, como forma de distender la situación con Siria. Sin embargo, según rumores que no han podido ser confirmados, aviones israelíes volaron a baja altura cerca de la frontera entre Siria y Turquía y no fueron detectados por los radares sino por los habitantes de la zona que avisaron a las autoridades. Otra vez según rumores no confirmados esta supuesta incursión de aviones sería un mensaje a Siria respecto a lo fácil que es para la Fuerza Aérea israelí ingresar al territorio de aquel país por rutas alternativas y alcanzar las bases militares de Siria, en caso de que se desate una real confrontación bélica. El Ministro de Defensa Barak y el jefe de Tzáhal, el General Gabi Ashkenazi dijeron que querían devolver a Israel su poder de disuasión militar, luego del entuerto de la Segunda Guerra de Líbano. Este incidente se podría inscribir en tal política. Y con el silencio gubernamental de fondo, nunca ha sido más válida la frase “hechos, no palabras”.
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Horas después de que Siria acusara a Israel de haber violado su espacio aéreo, generando preocupación internacional y temores sobre el posible estallido de un conflicto, tanto el gobierno israelí como Tzáhal optaron por el silencio. Incluso Estados Unidos evitó formular comentarios sobre lo ocurrido. Mientras tanto, en Damasco gritaban indignados por lo que definían como un acto de agresión israelí, y prometieron responder. Más aún, el Primer Ministro Ehud Olmert, en un evento de su partido Kadima, se refirió a todos los temas de seguridad que afronta Israel excepto al incidente del jueves con Siria, dejando atónito al público presente. Las operaciones de Tzáhal en Gaza, los continuos ataques con cohetes kasam y los soldados israelíes secuestrados por Hamás y por Hizbolá formaron parte del discurso de Olmert, pero nada sobre la noticia del supuesto incidente con Siria que recorrió el mundo. Tampoco formularon declaraciones la Canciller Tzipi Livni y el Vice Primer Ministro Jaim Ramón. El Vice Premier Eli Ishay, con quien este reportero dialogó el jueves por la noche, se mostró ofuscado cuando se le preguntó sobre la verdad de lo ocurrido. Ni una palabra sobre los reportes sirios. Lo mismo ocurrió con los generales del alto mando de Tzáhal. “Nada sabemos”, fue la respuesta tajante. El silencio da lugar a las especulaciones. Este supuesto incidente llega justo luego de que el Ministro de Defensa Ehud Barak decidiera reducir la presencia de tropas en las Alturas del Golán, y pusiera fin a los ejercicios masivos, como forma de distender la situación con Siria. Sin embargo, según rumores que no han podido ser confirmados, aviones israelíes volaron a baja altura cerca de la frontera entre Siria y Turquía y no fueron detectados por los radares sino por los habitantes de la zona que avisaron a las autoridades. Otra vez según rumores no confirmados esta supuesta incursión de aviones sería un mensaje a Siria respecto a lo fácil que es para la Fuerza Aérea israelí ingresar al territorio de aquel país por rutas alternativas y alcanzar las bases militares de Siria, en caso de que se desate una real confrontación bélica. El Ministro de Defensa Barak y el jefe de Tzáhal, el General Gabi Ashkenazi dijeron que querían devolver a Israel su poder de disuasión militar, luego del entuerto de la Segunda Guerra de Líbano. Este incidente se podría inscribir en tal política. Y con el silencio gubernamental de fondo, nunca ha sido más válida la frase “hechos, no palabras”.
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